A estas alturas ya deberíamos tener todos claro de que va The Walking Dead y Fear The Walking Dead, sin embargo, parece que está última quiere dar esos pasos que no ha dado su hermana mayor, pero le da mucho miedo hacerlo. El tercer capítulo de Fear The Walking Dead por fin nos enfrenta a lo que todos queremos ver: zombis, aunque existe un conflicto mucho más grande allá afuera que no terminamos por disfrutar en nuestros asientos.
Ya todos sabemos que Los Angeles es una gran locación para un evento como el apocalipsis zombi, pero la cruel manera en que AMC ha desempeñado su locación nos hace extrañar los bosques donde Rick y compañía se pierden constantemente. Esta semana la familia de Travis y Madison sigue separada por los disturbios que han llegado a las calles en consecuencia de los «asesinatos» por parte del gobierno a los «enfermos”.
La premisa de FTWD sigue fresca y enloquecemos por no ver el mundo llegar a su fin. Travis ya encontró a su familia y está refugiado de los disturbios que hay en la ciudad, mientras que Madison sigue sin explicarle a su hija todo lo que está ocurriendo allá afuera y solo la distrae con una partida de Monopoly. Entiendo que en el capítulo anterior tuviera gracia no explicar que ocurre con los no-muertos, pero dejar esa incógnita a tu familia cuando la ciudad se vuelve un caos y empiezan a surgir los primeros problemas que tanto nos explicaron un par de semanas antes… pues no tiene mucho sentido.
A lo largo del capítulo las dos cabezas de nuestra familia enfrentaran de cerca a los caminantes, y aunque saben todo lo que ocurre, entienden el problema con una mayor rapidez que Rick, y tienen todos los recursos a su alcance… no saben manejarlo. Es increíble que después de intentar proteger a su familia, haber programado el escape y hasta haber matado un walker no sean capaces de reaccionar ante la situación de un nuevo enemigo frente a sus ojos. Debo admitir que es frustrante como los protagonistas no aprenden.
De una u otra manera lo anterior nos lleva al punto central de The Walking Dead desde sus orígenes en los cómics: LOS PERSONAJES. Por más que los odiemos y nos hagan desesperar, es ese «aprendizaje o entendimiento» de la situación lo que nos hace ponernos en sus zapatos y el ejemplo más claro lo da Madison con su vecina y una situación que todos nos hemos preguntado cuando pensamos en: ¿Qué pasaría en un apocalipsis zombi?».
Al final el capítulo resulta ser el mejor de los tres que llevamos y pone buenos puntos sobre la mesa para la segunda mitad de la temporada, lo primero, cómo veremos caer a toda la fuerza militar que acaba de llegar, y lo segundo, qué oculta la familia de Patricia Reyes Spíndola.
Recuerden que Fear The Walking Dead se transmite los domingos en su idioma original y los lunes doblada por AMC Latinoamérica.
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