Reseña: Super Mario Bros. Wonder

Lo veas como lo veas, y sea cual sea tu opinión sobre el plomero de ascendencia italiana, Mario es el rey de los juegos de plataforma, y aunque las dos dimensiones habían sido olvidadas por Nintendo en tiempos recientes, Super Mario Bros. Wonder llega a Switch para recordarnos que Mario sigue siendo el representante por excelencia del género.

Creando una aventura 2D con giros sorprendentes y creativos por donde sea que camines, Super Mario Bros. Wonder es uno de los mejores juegos del año por más razones de las que pensaríamos, gracias a excelentes sistemas personalizables, una amplia variedad de conceptos y un variedad de modo multijugador que debería de ser replicada por más juegos.

Todo esto, por supuesto, es mi opinión a grandes rasgos. ¡Ahondemos más en esta reseña!

Cambio de Aires

Mario y sus amigos son invitados al Reino Flor por el Príncipe Florian, similar de Peach en su territorio, para observar la magia de las Flores Maravilla. Sin embargo, como ya es de costumbre desde hace más o menos 35 años, Bowser decide irrumpir en la fiesta para robar la Flor y literalmente convertirse en un castillo, dándole un significado completamente distinto al Castillo Bowser.

Ya que no se puede defraudar a un buen anfitrión como el príncipe Florian, Mario y sus compinches se lanzan a la aventura una vez más, en esta ocasión explorando mundos bastante diferentes a los que han conocido en el Reino Champiñón.

Super Mario Bros. Wonder es un juego de plataformas en 2D, al estilo del primer juego de la serie, Super Mario Bros., pero tomando varios elementos de a través de la serie para convertirse en una excelente muestra de por qué Mario es el rey de su género: con controles más similares a Super Mario World, incluyendo una mezcla del giro utilizado en este juego y el de New Super Mario Bros., cada nivel es un curso de obstáculos en el cual podemos ser libres y descubrir múltiples secretos.

Mario no está solo, y el nuevo héroe del Reino Flor puede ser uno de muchos personajes: podemos usar a Mario, Luigi, Peach, Daisy o uno de dos Toads y disfrutaremos de un reto similar, pero también puedes utilizar a uno de cuatro Yoshis o a Nabbit (o si eres muy fiel a localización, el Caco Gazapo), los cuales no reciben daño pero no pueden transformarse en lo absoluto; estas últimas opciones son excelentes para los más pequeños del hogar o las personas que estén hartas de perder por estar aprendiendo a jugar, ya que hasta puedes utilizar a Yoshi como en Super Mario World y escoltar a quien tú quieras gracias a tu invencibilidad.

Justo arriba mencioné las transformaciones, y me parece muy interesante que, a pesar de ser pocas, son agradables, cruzando finamente la división entre tradicional y novedoso: sí, hay Flores de Fuego, pero también puedes obtener una Flor Burbuja, la cual te deja encapsular a enemigos o incluso lanzar burbujas para utilizarlas como trampolín; puedes adquirir un sombrero de taladro con el cual puedes escabullirte por los pisos o techos de cuevas o, como seguramente has visto en el material promocional, convertirte en un elefante, regar plantas con agua y vencer a los enemigos con tu trompa.

Aunque sí, tener más transformaciones siempre es algo bienvenido, las que el título cuenta son increíbles y bien equilibradas, y se ven enormemente complementadas por las tres diferencias principales que Super Mario Bros. Wonder tiene a comparación de otros juegos 2D de la serie Super Mario.

Plomeros con Medallero

El primero de los cambios que mencionaré por su aparente tradicionalidad son las Insignias o Medallas, las cuales son modificadores que pueden cambiar enormemente la forma en la que disfrutas el juego.

Estas Medallas pueden ser sencillas, como la que te otorga un Super Champiñón al inicio de un nivel cuando no tienes ninguna transformación o la que te permite obtener más monedas. También pueden ser más mecánicas, como las medallas que te permiten flotar con tu gorra, saltar con mayor altitud, o simplemente dementes, como una medalla para expertos que te hace saltar incontrolablemente.

Aunque las Medallas sean conceptualmente sencillas, éstas convierten a cualquier nivel en un campo de juegos para la experimentación, pues aunque algunos niveles como los ambientados bajo el agua se ven enormemente beneficiados por la Patada Delfín, una Medalla que te permite nadar con mayor velocidad y control, en realidad puedes utilizar cualquier Medalla para cualquier nivel.

Poco a poco encontrarás favoritos, pero también observarás que hay ideas extremadamente interesantes tanto en concepto como en su origen: algunas medallas toman ideas del patito feo de la serie, Super Mario Bros. 2, con el salto cargado o el salto flotante que era característico de Luigi en el juego. Super Mario Bros. Wonder se convierte poco a poco en una mezcla de los grandes éxitos de la serie e ideas nuevas que pueden apantallarte en un abrir y cerrar de ojos.

Estos patios de juego, adicionalmente, albergan una estética simplemente maravillosa, por lo que no solo son divertidos, sino también vistosos. Este atractivo se ve nuevamente mezclado e intensificado, si no es que simplemente se convierte en algo demente, gracias a las Flores Maravilla, la gran mecánica que seguramente es la más interesante desde un atractivo conceptual.

Maravillosas Flores

Si has visto el material promocional de Super Mario Bros. Wonder seguramente has visto las Flores Maravilla. Estas fantabulosas flores convirtieron a Bowser en un literal castillo, así que sabes que pueden hacer lo que sea: a través de la jugabilidad momento a momento descubrirás que, en efecto, estas Flores son capaces de volar tu cabeza al momento de tocarlas (metafóricamente hablando, por supuesto).

Las Flores empiezan sencillas, como probablemente has visto, con pipas volviéndose serpientes o con niveles adquiriendo una estética de dos colores cual puesta en escena con sombras: esto, por supuesto, se va volviendo más loco conforme pasas de un nivel al siguiente.

Es extraño, porque creo que siempre que buscas expresar la forma en la que un juego te maravilla sabes que revelar sus secretos puede destruir sus sorpresas. Debido a esto, creo que lo mejor que se puede hacer si te interesa Super Mario Bros. Wonder es simplemente entrar con la menor cantidad de información posible, ya que cada nivel tiene una sorpresa para ti: puedes reír, sorprenderte o incluso espantarte, pero en todo momento serán un paso más positivo en el viaje de Mario y sus amigos.

Hablando de amigos, llegó el momento de hablar sobre el multijugador, la función que pensé sería la menos interesante, pero que lentamente se convirtió en algo que creo que cualquier juego que pueda debería de implementar.

Mundo Paralelo, Amistad Duradera

Los juegos de la serie Super Mario siempre han tenido una relación curiosa con el multijugador. Aunque inicialmente implicaba tomar turnos cuando alguien moría, poco a poco se volvió imperativo que los jugadores pudieran emprender su aventura al mismo tiempo.

Super Mario Bros. Wonder cuenta a grandes rasgos con dos clases de multijugador, local y en línea, y aunque comparten ciertas similitudes son bastante diferentes al final del día.

El multijugador local es similar a lo que verías en un juego como New Super Mario Bros U, con la implementación de cambios como la eliminación de colisión para hacer de la experiencia menos competitiva y más tranquila: puede que extrañes esto, pero creo que lleva a una aventura más enfocada a que todos puedan disfrutar de la jugabilidad y las locuras del Reino Flor sin que esta alegría venga de la desgracia de otros.

Sin embargo, es a través del multijugador en línea que Super Mario Bros. Wonder se convirtió en una experiencia como pocas hay en los videojuegos: es interesante cuánto puede brillar un juego y la influencia de otras personas cuando ni siquiera están jugando en el mismo espacio.

En lugar de jugar codo a codo con los otros personajes, verás sus siluetas en el nivel: si cualquiera cayera en un foso o fuera derrotado por un enemigo, este jugador se convierte en un fantasma y puede ser rescatado ya sea por las siluetas de sus compañeros o por paneles depositados por el equipo o por otras personas alrededor del mundo. La experiencia en sí es extraña, pero es definitivamente una de las mejores implementaciones de multijugador que Nintendo ha hecho en uno de sus juegos.

Este estilo de juego lleva a la creación de una diferente y excelente experiencia en la cual no puedes hablar, pero puedes comunicarte a través del movimiento. Ya sea que estés intentando mostrarle a tus nuevos amigos dónde encontrar una de las tres monedas especiales escondidas en cada nivel o un bloque oculto que te permita completar niveles especiales de búsqueda del tesoro, Super Mario Bros. Wonder une a los jugadores como lo harían otros títulos como Journey o Dark Souls, en los cuales se ha creado, con el paso del tiempo, un sentimiento de comunidad y etiqueta entre sus jugadores.

Un Nuevo Nivel para la Serie

Aunque todo ha sido flores y halagos para Super Mario Bros. Wonder, sí debo mencionar mi único problema con el juego: sus opciones limitadas de personalización de controles, las cuales pueden llegar a ser dolorosas para los dedos después de jugar en el modo portátil.

Esta falta de personalización es común en los juegos de Nintendo, y aunque tristemente es algo que ya podemos esperar (o no esperar), sigue siendo un aspecto menor, pues no elimina el hecho de que Super Mario Bros. Wonder es una obra maestra.

Tal vez no sea necesariamente una odisea, pues Super Mario Bros. Wonder es un juego relativamente corto comparado a otros títulos de su estilo. Sin embargo, es una explosión de ideas, creatividad y diversión; un homenaje a juegos previos con múltiples referencias a través de sus niveles, pero también con muchísima inventividad y novedades; es un patio de juegos y una densa demostración de lo que significa ser un juego desarrollado por veteranos y novatos, así como uno de los mejores títulos del año.

Lo veas como lo veas, Super Mario Bros. Wonder es una aventura digna de tu tiempo, ya sea por su encanto, por su potencial o por el amor con el que trata a la serie después de casi 40 años de trayectoria, con ideas novedosas y un mundo que podrá maravillarte a ti y a quien invites a jugar.