03 – Pokémon Emerald

Tras el éxito de las versiones de Game Boy Advance llegó la esperada tercera versión de Ruby y Zafiro. Con Pokémon Esmeralda la región de Hoenn alcanzó su máximo potencial en todas las vertientes que había explorado Game Freak: historia, desarrollo de personajes y competitivo. Tal y como Crystal lo había hecho, Emerald detalla algunos elementos de la historia de forma más clara e interesante, con la posibilidad de enfrentar a los dos grupos de villanos al mismo tiempo y por consecuencia la oportunidad de capturar a los dos legendarios e incluso al poderoso Rayquaza.

El post-game también tuvo una importante mejora con entrenadores de gimnasio más poderosos y una Elite Four distinta a la de años atrás y también vimos el imponente Frente de Batalla que se ha convertido en un elemento entrañable para la franquicia… y que no hemos vuelto a ver de forma tan sorprendente como en GBA. Con la tercera generación Game Freak parece apostar por un cambio que no solo afecta cómo se juega Pokémon o cómo se puede interactuar con sus diferentes opciones, sino cómo es que una nueva generación de personas puede recibir una idea que revolucionó los videojuegos.

Pokémon Emerald es para muchos el mejor juego de la serie y los Pokémon que vimos en esta generación son tan populares como los de Kanto. La tercera generación definió muchas de las cosas que hoy conocemos de sobra en Pokémon. Pero lo realmente interesante es que conocimos las intenciones de la serie, no se trata de una gran continuidad o un mundo que se conecta para satisfacer a todos, es una producto que se adecúa a los jugadores actuales y que puede o no interesarle a los de la vieja escuela. Todos tienen derecho a tener su propia versión de Pokémon.

Lo bueno:

– La mejor tercera entrega de una generación.

– La expansión de la mitología con Deoxys y Rayquaza.

– El Frente de Batalla.

Lo malo:

– Demasiado difícil de superar para algunos…

02 – Pokémon Black & Pokémon White

La Nintendo DS ya había cambiado suficientes elementos de Pokémon, pero jamás nos imaginábamos que Game Freak quisiera un cambio completo de toda la serie. Blanco y Negro llegaron con más de 150 Pokémon nuevos para la Pokédex y una región que estaba bastante alejada del resto: Unova. De igual forma hubo un importante cambio visual y sonoro, con un juego más cercano a los estándares semi tridimensionales de aquella época, dejando fuera los sprites clásicos en dos dimensiones. Una renovación total de la franquicia que bien podría ser considerada un reboot.

Y es que a diferencia de todos los juegos de Pokémon, Black & White nos impidió reencontrarnos con las criaturas que ya conocíamos, «obligandonos» a terminar la historia principal para encontrar compañeros de otras regiones; fue como jugar Pokémon por primera vez, con bestias que jamás habíamos visto. Y no solo eso, nuestro antagonista, un joven llamado N promovía la idea de liberar a nuestros Pokémon, aludiendo a una especie de esclavitud impuesta por los humanos… y todo termina girando sobre esa idea. La quinta generación es la más arriesgada por parte de Nintendo.

Evidentemente la idea de Black & White quedó en el olvido, pero su manera de enfrentarnos a las tradiciones de este mundo fue impactante. No solo se trataba de una evolución del concepto, sino de dejar atrás el clásico «atrapalos a todos» que había moldeado nuestra forma de pensar en Pokémon y sus diferentes productos. Es probable que la franquicia no soportara un cambio tan duro, pero siempre es interesante pensar en este juego como un grito de auxilio por parte de sus creadores. Quizá la evolución también puede ser una renovación completa.

Lo bueno:

– Todas las criaturas de la primera parte del juego son nuevas.

– La misión de N es una locura narrativa.

– Propuestas interesantes en la historia, los gráficos, la música y la región.

– Unova se parece mucho a nuestro mundo.

Lo malo:

– Es la generación del Pokémon helado, engrane y ¡una bolsa de basura!

– Pasó MUY desapercibido.

01 – Pokémon Heart Gold / Pokémon Soul Silver

Para el primer lugar hay un poco de fan service combinado con la perfección de la cuarta generación. Que un remake sea el mejor juego de Pokémon (en nuestro listado y el de muchos más) nos hace pensar en los «cambios» que ha tenido la serie; SÍ, Pokémon es lo mismo de siempre. Como Zelda, Mario y FIFA. Pero con una magia generacional que nos hace regresar o quedarnos como si fuera la primera vez que ponemos un cartucho en nuestra portátil de Nintendo.

Con los remakes de Oro y Plata tuvimos el regreso de Johto y Kanto ambientados en el perfecto 2D de clásico que nos brindó la Nintendo DS. Los cambios no fueron sustanciales, sino más bien una gran recopilación de los elementos que vimos brillar en Diamond, Pearl y Platinum. Las funciones en línea para combates y la GTS ya rayaban en lo perfecto; mientras que la historia de la segunda generación tuvo un nuevo énfasis con ayuda de una gran adaptación visual, musical y técnica en la DS.

Con los Pokémon de aquella región como Ho-Oh y Lugia, Celebi e incluso los perros legendarios. Obviamente hubo agregados que terminaron por dar continuación a eventos de otras generaciones y pudimos entender mejor algunas cosas relacionadas con el trío dragón, Arceus y otros legendarios. Y los detalles de los juegos originales quedaron intactos como la pelea contra Red o la posibilidad de atrapar a Mewtwo al llegar a Kanto. Todo esto con la posibilidad de estar acompañado por cualquiera de los más de 500 Pokémon que existían en aquellos días.

Lo bueno:

– ¡Cualquier Pokémon puede acompañarnos fuera de su Poké Ball!

– Increíbles secuencias animadas y música recreada.

– Johto y Kanto se ven geniales con el estilo de la cuarta generación.

– Probablemente los Pokémon más difíciles de la serie.

– ¡Pokéwalker!

Lo malo:

– Nada.

***

El mundo Pokémon está al alcance de un cartucho, no pierdas la oportunidad de vivir tu aventura para ¡atraparlos a todos!