Una de las grandes sorpresas del pasado E3 fue la presentación del nuevo título de The Legend Of Zelda para Wii U. A pesar de que vimos un video bastante corto, las reacciones de los seguidores de la franquicia no se hicieron esperar e incluso muchos nos encontramos en la discusión del sexo del protagonista, siendo nuestra reacción la respuesta que Nintendo esperaba y de la que Eiji Aonuma, principal responsable de la serie, nos habla a continuación:

 

Intenté, adrede, no hablar demasiado del juego en el E3. No estaba en condiciones de dar información clara y certera sobre qué tipo de obra es. Además, quería medir las reacciones de la gente intentando aproximarse y hacerse una idea del nuevo juego.

 

 

Después de todo el revuelo que causo el video mostrado en E3 parece ser que Nintendo ha logrado su objetivo y en parte hemos contribuido al rumbo que podría estar tomando el juego en estos momentos.

 

(Sobre el sexo de Link en el video mostrado) Esa es una de esas reacciones de fans que mencionaba y que me gustaría tomar en consideración en nuestro proceso de desarrollo. Eso no significa que el protagonista vaya a ser una chica.

 

Antes de concluir su sesión con la revista inglesa EDGE, Aonuma comento una vez más algunos elementos que encontraremos en el ya famoso «mundo abierto» que incluirá el próximo juego de Zelda, que según el director sería un regreso a las raíces de la franquicia, pero retomando elementos de los títulos más recientes:

 

La innovación de un vasto mundo abierto podría ser visto como un retorno a las raíces de la serie. Pero en dicho retorno también estamos trayendo con nosotros todo lo que hemos aprendido en los últimos tiempos y las maneras en las que la serie se ha desarrollado y crecido durante todo el tiempo, eso ayuda a crear nuevas y emocionantes posibilidades a la obra.

 

Sin una fecha de salida concreta esperamos que en 2015 llegue a las Wii U de todo el mundo el nuevo juego de The Legend Of Zelda, título que parece ser uno de los más atrevidos de la franquicia en los últimos tiempos.