Steep de Ubisoft Annecy llegó a finales de 2016 buscando llenar un hueco que series como Tony Hawk o SSX Tricky dejaron desatendido durante bastante tiempo. Y aunque pensamos que esta nueva incursión de parte de Ubisoft en los deportes extremos quedaría como un simple intento, fue a mediados de 2020 que se anunció en su conferencia Ubisoft Forward un nuevo título, Riders Republic, el cual  estaría expandiendo el concepto a nuevos horizontes.

Durante los últimos días, Ubisoft ha celebrado una beta para someter la calidad de gameplay y sus servidores a prueba – tuve la oportunidad de probar este título en desarrollo, y puedo decir que estoy gratamente sorprendido.

Aunque la prueba tiene ciertos elementos limitados, la beta de Riders Republic destacó a mi parecer por contar con una cantidad impresionante de contenido, lo cual permite obtener una conclusión coherente de lo que se podrá disfrutar en el título completo una vez que sea lanzado el próximo 28 de octubre. A continuación hablaré a detalle sobre lo que pude disfrutar en Riders Ridge y la amalgama de parques nacionales que el título utiliza como patio de juegos.

Un amplio y vistoso mundo

Como mencioné, el mundo de Riders Republic está compuesto por una combinación de parques nacionales estadounidenses, como Yosemite, Zion o el Parque Nacional de la Secuoyas. Aunque estos bellos parques están separados considerablemente por la distancia en el mundo real, Ubisoft, en mi opinión, acertó al unirlos en un solo espacio que logra cohesionar un mundo fluido, lo cual demuestra ser útil en algunas de las mejores competencias.

Sin embargo, no nos saltemos lo básico, que implica resaltar las diferencias entre Steep y Riders Republic. En general, Steep se enfocó en cuatro experiencias: snowboarding, esquí, parapente y trajes aéreos o wingsuits. Posteriormente, con DLC, añadió otros métodos de transporte, incluso añadiendo trajes de propulsión a cohete: afortunadamente, Riders Republic logra tomar lo que es en mi opinión lo mejor de Steep y permite simplificarlo para crear un sistema bastante agradable.

Para empezar, podemos comentar que Riders Republic se divide en tres disciplinas: tierra, con carreras y pruebas de ciclismo; aire, con carreras y eventos de vuelo en trajes aéreos y a propulsión de cohete; y hielo, con eventos de snowboard y esquí. Hasta cierto punto, es una experiencia que nos llevará por tierra, aire y agua (aunque sea congelada).

En conjunto con estos métodos de transporte, Riders Republic también aprovecha una categoría especial para “juguetes”, una clase de vehículos que abarcan desde motonieves hasta esquís con propulsión a cohete. Así es, Ubisoft no se quedó atrás de la familia Toretto, y esto le añade mucho valor al juego y su sentido de humor donde la aventura se lleva al extremo, incluso en la credulidad de algunos eventos. Esto es importante de resaltar, ya que Riders Republic no busca ser un juego de simulación realista como Microsoft Flight Simulator o el próximo Skate: Ubisoft quiere crear una experiencia divertida, y a mi parecer es lo que está logrando.

Accesible y entretenido

El método de control en las diferentes disciplinas es variable y extremadamente accesible, algo que quiero elogiar del equipo multi-estudio de Ubisoft: si no tenemos ganas de alinear nuestros trucos, podemos activar un aterrizaje automático, mientras que es posible usar esquemas de control diversos, incluso incluyendo uno para los amantes de Steep y su forma de ejecutar trucos.

En caso de requerirse, Riders Republic nos permite utilizar una función de Retroceso o Rewind que nos permite corregir nuestros errores en segundos, algo visto en títulos como Forza Horizon. En el caso de competencias en solitario, la carrera se detiene por completo y podemos afinar todos nuestros pedaleos; o deslices, en el caso de carreras multijugador. La función funge más como un retorno al último punto de control, algo así como un Lakitu moderno, obligándonos a ser cuidadosos con cómo la utilizamos.

En el caso de que un evento o área resulte ser extremadamente frustrante por su dificultad o por la habilidad de nuestros contrincantes, el sistema de viaje rápido disponible en el mapa es extremadamente práctico, permitiéndonos entrar a una carrera rápidamente o regresar a nuestra base para cambiar de aires en el momento que queramos.

La base en la cual encontraremos todos los eventos disponibles es Riders Ridge, un espacio que funge como un hub que permite a jugadores comprar nuevas vestimentas, compartir pistas y trucos (un elemento importante, que forma parte del sentido de comunidad del título), así como iniciar el  matchmaking para algunos de los mejores modos del juego.

Una competencia para cada quien

En concepto, Riders Republic tiene un enfoque en carreras y competencias de trucos al estilo de las series que mencionamos anteriormente. Sin embargo, destaca en cuatro modos que me hacen pensar seriamente en probar el juego en su totalidad en unos meses.

El primero está en los retos Shackdaddy, los cuales nos obligan a atravesar carreras en situaciones extremadamente ridículas, como usando un carrito de helados en lugar de una bicicleta o un letrero de madera partido en dos como esquís. Al obligarnos a usar cierto equipo, cambia un poco el tipo de juego de Riders Republic, el cual nos permite en carreras “regulares” cambiar nuestro equipo, ya sea bicicletas, snowboards, esquís o trajes de vuelo con mejores números o capacidades.

El otro se llama Tricks Battle, el cual consiste (al menos durante esta beta) en una batalla campal 6 contra 6 que nos recordará a un shooter de captura de áreas: sin embargo, la forma en la que capturamos áreas es mediante trucos que hacemos en nuestra snowboard o nuestros esquís. Este modo es fascinante y muy entretenido, ya que te permite moverte en un espacio semiabierto (algo similar a los ya mencionados títulos de Tony Hawk) en un ámbito competitivo y multijugador. El mapa disponible durante la prueba tiene múltiples recovecos y espacios en los cuales soltarnos con trucos, y no se sintió repetitivo en lo absoluto.

El tercero es quizás un poco sencillo, y consiste en el Free for All, modo que recopila retos diversos en un todos contra todos de 12 jugadores. Durante la prueba, el modo se enfocó en carreras de trucos de bicicleta, pero promete ser un buen espacio en el cual disfrutar de una carrera rápida en modo multijugador.

Finalmente, y quizás la razón por la cual Riders Republic promete mucho en la nueva generación de consolas, se encuentra la Mass Race, algo que logra combinar todas las disciplinas incluidas en el título, incluso las locas como esquís cohete, en una carrera campal de más de 50 deportistas. Dividida en varias secciones, esta carrera masiva es extremadamente similar a una copa de Mario Kart, con puntajes que obtenemos de acuerdo a nuestra posición en cada una de las tres etapas de la contienda. Aunque lamentablemente no pude llegar más allá del décimo lugar en el podio de las carreras en las que participé, el ambiente frenético me recordó muchísimo a Fall Guys, haciéndome sentir en una versión extrema de las competencias de este último juego.

Las 3 C’s: Coleccionables, Cohetes y Canciones

No puede ser un título de Ubisoft si no tiene coleccionables: además de contar con una cantidad de carreras considerable, así como espacios en los cuales podemos apreciar las maravillas naturales de los siete parques englobados en Riders Republic, el título promete tener en su mapa más de 500 coleccionables, así como múltiples modelos de bicicletas, esquís, snowboards, trajes aéreos, equipos de propulsión a cohete y diversos juguetes extremos. Eso sí, ya dependerá de cada jugador si esto es una buena noticia o una mala.

Aunque no es una necesidad, todo título de deportes parece tener como requerimiento un soundtrack a la medida de sus deportes, y Riders Republic no es la excepción: con un repertorio que incluye a clásicos de los 2000’s como Green Day o The Offspring, raperos como Ice T o Wiz Khalifa, o artistas más alternativos como Thom Yorke o Jamie xx, puedo admitir que me encontraba feliz con las pistas que escuchaba mientras pedaleaba cuesta abajo o intentaba encadenar trucos en mi snowboard.

Un trabajo en progreso pero prometedor

Queda por conocer más detalles de este título, y me imagino que Ubisoft está guardando varias cartas bajo la mesa: aunque pudimos vivir el principio de nuestro viaje por las disciplinas de lo extremo y la historia que tiene un característico sentido del humor al estilo de un mockumentary, hay varios elementos que, una vez complementados, crearán una experiencia completa.

Tomando todo esto en cuenta, Riders Republic pinta para convertirse en una excelente alternativa en el género de deportes extremos, el cual en ocasiones se encuentra falto de nuevas propuestas. Conociendo a Ubisoft y su excelente soporte post-lanzamiento a títulos recientes como Assassin’s Creed: Valhalla o Rainbow Six: Siege, queda claro que Riders Republic podría ser, potencialmente, un título permanente en nuestra rotación de juegos durante años por venir.