Se podría decir que el caso de Assassin’s Creed Unity y Ubisoft va ser la razón de los demás estudios para que piensen dos veces en lanzar un título destrazoso al mercado. En CD Projekt Red ya tomaron nota, pero como The Witcher III: Wild Hunt es uno de los juegos más ambiciosos que podemos esperar en el 2015, se dieron la necesidad de retrasarlo, por tercera ocasión, para mantener la expectativa y que no termine lleno de bugs y errores.

 

Adam Kiciński, integrante de CD Projekt Red, es quien ha hablado con varios periodistas financieros polacos para explicar la razón de esta fuerte y sabía decisión: esta entrega va ser grande y abierto, por lo que no se pueden dar el lujo de entregar un juego malhecho a los fans. Además de que en la actual generacion, el mercado  está aterrorizada por los productos mal pulidos, véase el caso de Halo: The Master Chief Collection, Driveclub, Battlefield 4, etc.

 

«Los jugadores han aceptado muy bien nuestra decisión. El mercado le tiene miedo a los juegos mal pulidos en plataformas de nueva generación. Hay todavía muchos pequeños errores que corregir ya que el juego es muy grande. Es la única razón que hay detrás del retraso.»

 

«No asumimos en su momento que el juego fuera a ser tan grande, sólo después de juntar todas las piezas que lo componen nos dimos cuenta de que es más grande que los dos primeros juntos. Déjenme que les recuerde: es abierto y no es lineal. Sabemos lo que tenemos que hacer, sólo tenemos que hacerlo. No queremos lanzar el juego con bugs que rompa la experiencia del juego.»

 

También Kiciński comenta que por haber anunciado una fecha de lanzamiento apresurada, el estudio está pagando las consecuencias, algo que para nosotros, como consumidores, vamos a salir beneficiados ya que estaríamos recibiendo un producto de calidad y no algo incompleto ni podrido.