Blizzard ha hecho oficial la disputa legal antes la compañía alemana Bossland, responsables de la creación y comercialización de  Watchover Tyrant, un hack de Overwatch que otorga injustas ventajas al comprador.

Entre las ventajas que provee este hack se encuentra la posibilidad de observar a los enemigos en el radar lo cual atenta gravemente con la competitividad de las partidas en linea y afecta a los jugadores en el proceso. Con esto en mente, Blizzard ha decidido presentar una demanda en la cual han mencionado que el hack causa «daños masivos e irreparables» a Overwatch, al igual que viola derechos de autor y los términos de servicio del título.

Cabe recalcar que esta no es la primera vez que la compañía americana se enfrenta a Bossland ya que estos han tenido una extensa historia de batallas legales desde hace bastante tiempo con hacks utilizados para otros juegos como World of Warcraft y Heroes of the Storm.

Parece ser que los beneficios obtenidos por estas herramientas ilegales suelen ser más que lo que la corte puede quitarle a estos sujetos. ¿Será este el verdadero camino de acción o hay otras medidas para contrarrestar el uso y desarrollo de estos hacks?