¿Ustedes creían que el dopaje en los deportes sólo se daba en los atletas del alto rendimiento? La presente noticia está para demostrar lo contrario.
Los eSports, también conocidos como deportes electrónicos, son competiciones globales de jugadores profesionales de videojuegos que han tenido un crecimiento exponencial gracias a la cantidad de publicidad que se invierte en ellos además de ser objetivo de grandes patrocinios. Sin embargo, a pesar de que este tipo de competiciones son muy populares y tienen un séquito de aficionados bastante amplio, sus medidas de control y organización aún están por los suelos.
Seguramente no es la primera vez que esto ocurre, sin embargo, sí es la primera vez que un famoso jugador de la competición llamado Kory «Semphis» Friesen (conocido por su participación en encuentros de Counter-Strike), confirma este hecho. Así pues, el jugador reconoce abiertamente que él y su equipo, en un evento ESL en Polonia durante el mes de marzo, jugaron bajo los efectos del Adderall, una droga psicoestimulante utilizada de manera regular en el tratamiento al trastorno de hiperactividad con déficit de atención y la narcolepsia; en este caso, puede ayudar a los jugadores de eSports a que se centren en largos periodos de actividad.
Aunque en los campeonatos no hay forma de verificar la legalidad de las partidas o de comprobar si el rendimiento de los jugadores no se ha visto alterado por alguna sustancia ilegal, y aunque obviamente las normas dicen que no puedes jugar bajo la influencia de alguna droga o alcohol, no existe un control establecido para validar la entereza de los participantes, sin embargo, Friesen asegura que estos efectos son evidentes ya que con sólo ver el vídeo y escucharlos hablar, puede notarse.
Con esto, seguramente las medidas de seguridad y control estarán más alertas que nunca en los próximos eSports.