Desde que Nintendo abrió la puerta del género karting con Super Mario Kart, este se ha convertido en uno de los favoritos de la comunidad. Desde entonces, hemos podido ver un gran número de juegos con esta fórmula, y claro que el erizo más veloz del mundo no podía quedar fuera de esta fiesta. Desde la Game Gear con Sonic Drift hasta la reciente saga Racing, Sonic ha tenido altas y bajas a la hora de experimentar con los títulos de carrera. Este año, SEGA nos ha dado Sonic Racing CrossWorlds, un título que promete ser una de las mejores propuestas para todo fan de los juegos de karts y, sobre todo, uno de los puntos altos en el historial del erizo. Aquí te contamos si SEGA ha logrado su cometido o si el hype está un poco más alto de lo que debería.
Sonic es más veloz en auto
A diferencia de la entrega anterior, CrossWorlds no tiene un modo historia ni nada que se le parezca. Este puede ser uno de los puntos que más juega a favor del título, pues nos ahorramos una historia forzada en donde los personajes deben salvar al mundo con carreras y podemos enfocarnos meramente en el gameplay.
Ahora sí, hablando de los distintos modos de juego, CrossWorlds cuenta con el tradicional Grand Prix. Este se compone de 4 carreras; en las primeras 3 recorreremos una pista inspirada en alguno de los juegos del erizo. Las pistas son un deleite para todo fanático de la saga, con escenarios inspirados en juegos como Sonic Unleashed o Sonic x Shadow, e incluso algunas que no necesariamente se inspiran en un juego único y deciden mezclar varios elementos en el entorno para ser una pista única que será necesario recorrer más de una vez para captar todo lo que presenta.

El principal atractivo de este juego, y el que le da nombre, es la mecánica del “CrossWorld”. Al entrar a la segunda vuelta, el corredor que va en primer lugar podrá elegir entre 2 anillos que cambiarán por completo la pista original en la que estábamos corriendo. Esta mecánica convierte el juego en algo impredecible, ya que el ritmo de la carrera cambiará en su totalidad durante una vuelta completa y será cuestión de habilidad y, en muchos casos, suerte, no perder nuestra posición de ventaja y ganar la carrera.
También regresan las secciones de avión y barco que se presentaron en Racing Transformed, aunque no se sienten tan divertidas como antes. Se sienten más como un agregado puesto para evitar las quejas de su ausencia. Si bien no son un desastre, tampoco nos encantó su uso en este título. Una vez terminadas las 3 pistas originales, entraremos en la cuarta carrera, la cual será una mezcla de las 3 anteriores: una vuelta por pista, a las que entraremos mediante los anillos del CrossWorld.

Es importante decir que, a diferencia de otros juegos donde el personaje influye en la velocidad o manejo, aquí no ocurre eso. Aquí lo que en verdad influye es tu auto. Por ejemplo: el auto determinado de Knuckles es bueno en manejo, pero no es muy veloz. En cambio, si buscas velocidad, tendrás la opción de utilizar las Extreme Gear. Las tablas de patinaje regresan de la saga Riders como uno de los mejores agregados para este título. Estos “vehículos”, por decirlo así, son muy veloces, pero más difíciles de controlar, así que te recomendamos probar todos los estilos y ver cuál es el que mejor se apega a tu estilo de manejo.
Uno de los puntos importantes del juego es su personalización y objetos. Sonic CrossWorlds tiene un gran número de opciones para personalizar tu auto: pintura, llantas, bocina e incluso detalles interesantes como el aura y stickers para la carrocería. Puedes tunear tu auto a tu gusto y como sientas que lucirá mejor para ganar o perder con estilo. Estas mejoras las podemos conseguir al ganar tickets en las carreras y comprando objetos en la tienda de personalización.

Sonic CrossWorlds presenta un gran nivel de dificultad. Todos los corredores tienen el objetivo de ganar y aprovecharán el mínimo error para dejarte en último lugar. Otro punto importante a la hora de competir es un contador de rings: mientras más rings tengas, tendrás un poco más de velocidad, aunque es muy fácil perderlos, ya sea con un objeto utilizado en tu contra o chocando con un rival, tu contador de rings irá bajando.
Para contrarrestar esta dificultad, contamos con la opción de equipar artilugios. Estas mejoras van desde iniciar la carrera con un objeto de velocidad, lograr mejores derrapes o incluso aumentar el número de rings que podemos conseguir. Podemos crear hasta 5 grupos de artilugios y equiparlos antes de una carrera, pero no podremos modificar el grupo hasta que salgamos al menú principal del juego.

Sonic vale la pena… olvidarse de Mario Kart
Hablando de los objetos, el título presenta una variedad interesante, pero sin que ninguno destaque del resto. Tenemos un guante de box que ataca a un rival cercano, un tornado que sirve para alejar contrincantes e incluso evadir objetos que te lancen, y hasta un fantasma que ataca directamente al primer lugar. Un punto algo polémico del juego es la saturación en la pantalla que muchas veces ocurre. El título es muy frenético y en más de una ocasión no sabremos qué pasa en la pantalla. Si a esto le sumas que, aunque los controles son bastante responsivos, a la hora de tener tantos elementos en pantalla muchas veces estaremos en un ambiente descontrolado que realmente dificulta disfrutar el juego. Puede que esto no sea una opinión general, pero sí es un punto que debemos mencionar. Te recomendamos entrar a la sección de consejos para revisar qué función tiene cada objeto y no te sorprenda para mal cuando una pesa gigante te arrebate el primer lugar.

Otra de las mecánicas importantes de este juego es el sistema de rival. Al iniciar un Grand Prix, el juego te asignará un rival en automático y, en ocasiones, te dejará elegir entre 2 opciones de rival, uno con mayor dificultad que otro (aunque realmente puedes elegir al personaje que quieras como rival). Esta mecánica le añade gran dificultad al juego y en muchas ocasiones te será un mayor reto ganarle a tu rival que ganar la carrera en general. Esta opción también incluye pequeñas interacciones antes, durante y después de la carrera.
También contamos con el tradicional modo contrarreloj, en el cual podremos competir solos o contra un corredor fantasma. Esto nos sirve para practicar las pistas, tanto base como las extras al entrar al anillo de Crossworld. Otro de los modos es el parque de competición, que consiste en una serie de carreras con distintas variaciones, como recolección de anillos, ataques a rivales o chocar con tu equipo para ganar un pequeño turbo. Lo más llamativo de este modo es que se nos asignará un equipo rival al que debemos derrotar 3 veces para conseguir un nuevo auto.

El juego cuenta con multijugador local de hasta 4 personas y un modo online multiplataforma. Al jugar en local, nos encontramos con una experiencia bastante entretenida, pero que puede volverse muy confusa, ya que el juego es muy caótico en ocasiones y puede llegar a complicarse debido a lo saturada que se vuelve la pantalla. El modo online no pudimos probarlo en la versión completa del juego, pero, en base a lo jugado con la beta abierta de hace unas semanas, podemos decirte que estamos ante una experiencia bastante sólida y entretenida, sin problemas en el emparejamiento y sin lag o bajones de fps.
Como otros puntos a mencionar, tenemos un apartado gráfico maravilloso. El juego tiene la opción de dar prioridad al rendimiento o a la imagen; te recomendamos darle prioridad al rendimiento del título, pues la calidad de imagen no baja tanto y tenemos un juego más fluido.

Otro de los puntos a destacar, y que ya es clásico en los juegos del erizo, es el soundtrack. No nos equivocamos al decirte que estamos ante una de las mejores bandas sonoras de los últimos años. Podemos escuchar las melodías originales de los niveles de Sonic Colors, hasta llegar a una reinterpretación de Super Sonic Racing, que son un verdadero deleite al oído.
De igual forma, por primera vez contamos con una adaptación al español latino, pero únicamente en texto. En trabajo de voz, seguimos contando con el doblaje castellano ya de varios años en la franquicia. Por suerte, podemos cambiar el idioma tanto de texto como de audio en el menú principal del juego, así que podemos escuchar la voz en inglés de los personajes con texto latinoamericano. Ojalá pronto SEGA decida darnos un doblaje para toda Latinoamérica unida, y quizá con las voces de la película (soñar no cuesta nada).

En conclusión, Sonic Racing CrossWorlds es un juego muy entretenido y bastante sólido con lo que quiere presentar. El trabajo hecho en las pistas y la mecánica del salto entre mundos dan una variedad inmensa a la hora de competir, y realmente puedes gastar mucho tiempo personalizando tu vehículo. La variedad de personajes que tiene el juego base es interesante para cualquiera que sea fan del erizo o haya llegado aquí por las películas. Recordemos que también llegarán personajes de otras sagas como Joker de Persona y la misma Hatsune Miku, al igual que personajes invitados como Pac-Man, Bob Esponja e incluso el bombardero azul, que correrán junto a Sonic en un futuro cercano.
Por otro lado, los objetos son bastante planos y su uso puede llegar a ser confuso al inicio. Igual, la mecánica de vuelo y barco se siente desaprovechada. Y no podemos dejar de mencionar la saturación en pantalla, que muchas veces se hace presente y es otro nivel de dificultad que no necesariamente es algo bueno. No nos atrevemos a comparar este juego con su competidor más obvio, porque claramente son dos estilos distintos y cada uno destaca en su propio camino.

Sonic Racing es un juego muy bueno y es una de las mejores opciones para las personas que buscan un título que les de horas de diversión y contenido a largo plazo. Nos encanta que Sonic tenga esta buena racha de títulos y, si bien no son perfectos, por suerte hemos dejado atrás esa oscura época de fracasos.
Pros:
+ Jugabilidad dinámica con la mecánica CrossWorld
+ Personalización profunda de vehículos
+ Gran dificultad y variedad de modos
+ Excelente apartado audiovisual
Contras:
– Pantalla saturada y caótica
– Objetos poco memorables
– Secciones de avión y barco desaprovechadas











