Need For Speed es una franquicia con muchos años a cuestas. Y si bien las últimas entregas han dejado mucho que desear, nadie duda de la calidad de juegos anteriores como el legendario Hot Pursuit. Afortunadamente, éste acaba de ser remasterizado y el resultado es un título tan bueno y divertido como el original, pero con una muy necesitada capa de pintura.

Bienvenidos al condado de Seacrest

Need For Speed: Hot Pursuit Remastered es la definición de diccionario de un remaster 100% fiel. Este nuevo juego tomó una base divertida, entretenida y muy frenética, y la dejó intacta. Prácticamente, la única diferencia es que esta nueva versión tiene mejoras gráficas que lo acercan al estándar actual. El título se maneja tan bien como siempre, pero ahora se ve muy bien y nos hace olvidar que la entrega original ya tiene 10 años.

Need For Speed: Hot Pursuit Remastered te lleva al ficticio condado de Seacrest en la costa oeste de Estados Unidos, en donde las carreras ilegales son el pan de cada día. Para lidiar con los «delincuentes», la policía tiene que usar medidas extremas: por eso, corre modelos de carros igualmente rápidos, en su afán de alcanzar y detener a los corredores.

Si bien los títulos de carreras hoy día incluyen un gran número de complejos sistemas de progresión, Need For Speed: Hot Pursuit Remastered es una vuelta a las bases y nos recuerda tiempos más sencillos en los que podías entrar a una carrera y rodar a toda velocidad con un par de clics. El modo Carrera te muestra una gran variedad de eventos en diferentes pistas y te da la oportunidad de atacarlos desde el punto de vista del corredor o el policía. Por un lado, tus objetivos tienen que ver con ganar carreras o escapar de la policía y, por el otro, tus objetivos son detener a los corredores a toda costa.

Policías y ladrones

El bucle de jugabilidad es muy directo y sencillo: simplemente elige un evento, revisa los objetivos y trata de cumplirlos al máximo, lo que te brinda medallas y puntos, con lo que subes de rango en cualquiera de los 2 frentes. El subir de rango te otorga diferentes vehículos, y afortunadamente la progresión es suficientemente veloz, como para poder probar nuevos e increíbles autos cada par de carreras. El tiempo en los menús es mínimo, por lo que la mayor parte de tus horas jugando Need For Speed: Hot Pursuit Remastered las pasas corriendo por las bonitas y variadas pistas a toda velocidad. Hay que apuntar la buena decisión que fue crear el condado ficticio de Seacrest, pues cuenta con un buen número de biomas que van desde los bosques y los desiertos hasta las ciudades y las zonas heladas. De esta manera, siempre hay variedad de paisajes a la hora de correr.

Hablando del manejo, Need For Speed: Hot Pursuit Remastered es un juego de carreras que se acerca más al género arcade que al de simulación. De esta manera, manejar un coche es más sencillo que, por ejemplo en Gran Turismo o Project CARS, pero tampoco parece un kart como en Burnout Paradise. Este curioso balance permite que cualquiera puede tomar el control y empiece a sentir la adrenalina de ir a toda velocidad, pero los más clavados también tienen margen de maniobra para realizar movimientos más expertos. Si hay algo que este juego hace muy bien es reflejar y hacerte sentir la velocidad. El excelente uso del motion blur genera ese reflejo en el plexo solar que todos sentimos cuando vamos demasiado rápido en la vida real. Quizá mi única queja en el manejo es que en ocasiones el rubberbanding puede ser muy extremo, lo que juega tanto a tu favor como en tu contra.

Cuando dije que la policía debe detener a los corredores a toda costa, lo dije en serio: muy pronto en tu aventura empiezas a desbloquear habilidades especiales que puedes utilizar para destruir los autos enemigos con el objetivo de pararlos. En tu arsenal tienes tiras de púas, barreras de patrullas, pulsos electromagnéticos y hasta helicópteros, los cuales puedes activar fácilmente con las flechas del control. Y si eres corredor, compartes algunas de estas herramientas o tienes otras que te ayudan a escapar. En este sentido, Need For Speed: Hot Pursuit Remastered es similar a Burnout Paradise. Sí, correr es muy divertido, pero es más divertido estamparte contra vehículos enemigos y hacerlos explotar o salirse de la carretera. En muchos de los eventos tu objetivo es destruir a los otros corredores, pues no pueden escapar o ganarte si están fuera de combate. Y bueno, si lo tuyo es la velocidad, también hay eventos de carreras contrarreloj más tradicionales.

Need For Speed: Hot Pursuit Remastered pone mucho énfasis en la mecánica de destrucción, pues cuando hay un accidente cambia a modo cámara lenta por unos segundos para que puedas apreciar los aparatosos choques de vehículos en todo su esplendor. Por otra parte, el título incluso te recompensa por manejar peligrosamente: realizar acciones como manejar en el carril contrasentido, embestir otros coches, derrapar o descubrir atajos de de terracería te otorga dosis de turbo, con las cuales obtienes impulsos momentáneos para rebasar o chocar a ese contrincante que se te estaba escapando.

Todo lo que brilla es oro

Visualmente, Need For Speed: Hot Pursuit Remastered es aceptable, aunque no impresionante. Los modelos de los vehículos son fieles, brillantes y muy detallados, con texturas de alta fidelidad. No obstante, las texturas de los paisajes y de los personajes son bastante bajas, aunque para ser francos es poco probable que pongas atención a estos detalles si vas a toda velocidad. Es notorio que la desarrolladora se enfocó particularmente en los vehículos: algo nuevo en esta versión es un modo Garage, en donde puedes ver todas y cada una de tus adquisiciones y leer sus descripciones. También hay un poco de personalización, pero la realidad es que es bastante pobre, pues básicamente solo te deja cambiar el color y el material del acabado. Después, un modo fotografía bastante completo te deja tomar increíbles imágenes en tu garage o en medio de una carrera. Por otra parte, la banda sonora tiene grandes artistas y muchos temas reconocibles, aunque la realidad es que la música pasa a segundo plano cuando el sonido de los motores y las colisiones están siempre al frente.

Need For Speed: Hot Pursuit Remastered incluye todo el contenido de la entrega original y sus expansiones, lo que quiere decir que aquí encontrarás todos los autos DLC. Si combinas el gran roster con el sencillo pero gratificante sistema de progresión, cada pocos minutos obtienes una recompensa más veloz o bonita, algo que siempre se siente bien.

Por último, Need For Speed: Hot Pursuit Remastered también tiene un modo online que, afortunadamente, tiene juego cruzado. Así, puedes entrar a eventos rápidos o específicos para jugar con desconocidos, o crear lobbies para jugar con tus amigos, sin importar su plataforma de preferencia. Tuve la oportunidad de disfrutar varias partidas y puedo decir que la experiencia siempre fue fluida y sin latencia ni desconexiones.

En resumen, Need For Speed: Hot Pursuit Remastered es un gran remaster, pues dejó intacto lo mejor de la entrega original y simplemente añadió algunas opciones, detalles y mejoras para actualizar la experiencia al estándar actual. Sin duda, hubiera apreciado añadidos más sustanciales; pero si lo que buscas es un juego de carreras y choques rápido, sencillo y muy divertido, definitivamente este título no te decepcionará.

Pros:

+ Sistema de progresión directo y gratificante

+ Jugabilidad frenética y divertida. ¡Destrucción!

+ Juego cruzado

Contras:

– Algunas texturas dejan que desear

– Algunos extras hubieran estado bien

– El rubberbanding es un poco exagerado